Como la mayor parte de los norteamericanos, yo apoyaba al gobierno y sus políticas terribles — puedo mirar una forma vieja de “W2” para ver cuánto. Yo no quería apoyar al gobierno, pero debo confesar que mi apoyo estaba en dólares y centavos, mientras que mi oposición estaba en opinión solamente.
Decidí finalmente que no es suficiente negar apoyo moral. Debo poner mi dinero donde está mi boca.
, cesé mi pago del impuesto federal sobre el ingreso y comencé a trabajar por, en lugar de contra, mis principios. Dejé mi empleo y rebajé mis ingresos para que ya no debo pagar el impuesto federal sobre el ingreso. Transformé mi vida, dedicándome a las cosas realmente importantes, para poder vivir bien y con seguridad con menores ingresos.
Estoy estando práctico, aprendiendo acerca de los leyes y acerca cómo vivir bien por estando frugal. Puedo llevar en mis recursos sin pagar el impuesto federal sobre el ingreso — honradamente, tranquilamente, y legalmente — y puedo evitar otros impuestos federales también.
Para vivir vidas honorables, no contaminadas por los crímenes del gobierno, requerirá trabajo duro y cambios prácticos. No será suficiente quejarse, tuitear memes, acariciar ilusiones, o votar. Tenemos que poner nuestro mayor esfuerzo en favor de nuestros principios, en lugar de permitir que este esfuerzo sea robado por el recaudador de impuestos y luego utilizado en maneras que nos avergüencen.
En éste blog, escribo sobre éste experimento en vivificar mis principios — el porqué elegí esta senda, y lo que estoy aprendiendo durante de viaje. (Pero escribo en su mayor parte en inglés.)
— Davíd Gross
